Este lunes, la oposición consignó al CNE cerca de 80 cajas, cada una con 2500 planillas, para un total de 200 mil planillas, contentivas de 1.850.000 firmas.
De acuerdo al secretario general de la Mesa de la Unidad Democrática, Jesús “Chúo” Torrealba, las rúbricas fueron entregadas muy temprano en la mañana.
Al respecto, Torrealba dijo que: “Hoy madrugamos al oficialismo. Ya entregamos las firmas. Pa’ lante!”.
La coalición opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD), que controla el Parlamento, asegura haber recolectado casi 10 veces más que las 195.721 (1% del padrón electoral) que exige el Consejo Nacional Electoral (CNE), para entonces pedir que se inicie el proceso.
«Nos habían dado 30 días -a partir del martes 26 de abril- para recolectarlas, lo hicimos en «tiempo récord», declaró en la noche del domingo el vocero de la oposición, Jesús Torrealba, al anunciar que «el próximo martes» las presentarán al CNE, al que acusan de aliado del gobierno.
El CNE deberá constatar en un plazo de cinco días el número, y luego llamar a los firmantes a ratificar su apoyo con la huella en otros cinco días continuos. Será solamente después de que las valide, que autorizaría la recolección de cuatro millones (20% del padrón) para convocar al referendo.
«También lo vamos a hacer en tiempo récord, porque el país quiere salir de este gobierno», agregó Torrealba, secretario ejecutivo de la MUD.
Pero un nuevo foco de conflicto se avecina. Tania D’amelio, rectora del CNE, afirmó en Twitter que para comenzar la constatación de firmas «se debe cumplir el lapso de 30 días fijado para la recolección del 1%» del padrón, es decir a partir del 26 de mayo.
La oposición, que según sus cuentas el referendo podría realizarse a finales de este año, asegura que la constatación debe iniciar apenas sean entregadas el martes, un criterio que comparte otro rector del CNE, Luis Emilio Rondón. La divergencia deberá aclararse en breve.
El constitucionalista José Ignacio Hernández opinó que según la ley «el lapso de 30 días no debe dejarse transcurrir íntegramente».
Creciente malestar
En el poder desde 2013 tras el fallecimiento de su mentor, Hugo Chávez (2009-2013), Maduro anunció que para defenderse de esa ofensiva nombró una comisión que revisará las firmas, la cual se reunirá el lunes y acudirá al CNE.
Pero frente a la hipótesis de que tenga que dejar el poder por una vía constitucional o un golpe de Estado, llamó a sus seguidores a declararse en «rebelión» y declarar una huelga general indefinida.
Para revocar a Maduro, el «sí» debería sacar más de los 7,5 millones de votos con los que fue elegido tras la muerte de Chávez en 2013 para completar el período de seis años. La oposición está segura de lograrlo.
Una encuesta de la firma Venebarómetro indica que casi siete de cada diez venezolanos -68%- está a favor de que Maduro deje el poder y haya elecciones, en tanto que un 84,1% considera negativa la situación del país.
Fuente: NTN24