Gustavo Coronel
El analfabeto Nicolás Maduro está aún en Miraflores, después de terminar de arruinar al país pero, como vimos ayer, todavía en la OEA la mayoría de los países que conocen bien la tragedia venezolana hablan de la necesidad de un diálogo entre el narco-régimen y sus víctimas venezolanas. En 1942 estos hipócritas hubieran pedido un diálogo constructivo entre el nazismo y sus víctimas judías, justo antes de ser llevadas a los crematorios
¿Por qué se mantiene todavía el chavismo en el poder? Hay cuatro razones principales:
- El dinero petrolero, libremente distribuido por Chávez y, lo que queda, por Maduro, para comprar conciencias y lealtades, como se compra una hora de “amor” en un burdel. Ayer vimos que los únicos países que votaron en contra de la reunión en la OEA sobre Venezuela fueron los paisitos miembros de PetroCaribe y los parásitos del ALBA. Es un vulgar soborno a países cuyos gobiernos mercenarios serán castigados por la democracia venezolana;
- Los intereses políticos coyunturales de dos países de la región: USA y Colombia.La USA de Obama prefirió sacrificar la democracia venezolana a sus sueños de persuadir a Raúl Castro a entrar al redil de la democracia. Lo que logró USA fue atornillar a Maduro en el poder sin lograr que Cuba cediera un milímetro en su postura dictatorial. Pero ya Tomás Shannon no está manejando esta relación. La postura de USA ya cambió. En Colombia, Santos necesita a Maduro como alcahueta en la relación con las FARC y ello lo hace mantenerse “neutral” en la OEA, pidiendo un diálogo absurdo. Esta postura de Santos no va a cambiar abruptamente.
- La prostitución de la Fuerza Armada Venezolana.La cual ha convertido esta institución de ser parasitaria de la democracia a ser cómplice activo del crimen que se ha cometido contra la Nación. El llamado Alto Mando Militar, generales narcos y rasos rapaces son hoy el mayor sostén del régimen y colaboran con entusiasmo en el saqueo a la Nación;
- La combinación de controles y humillaciones por parte del régimen y de pasividad y falta de coraje ciudadano por parte de las mayorías. Los venezolanos han adoptado una actitud de sobrevivencia y no de resistencia frente al régimen. A pesar del heroísmo de quienes están presos o libres pero perseguidos, una buena parte del liderazgo democrático se ha plegado al chavismo, buscando acomodo con el narco-régimen y cabildeando activamente por un diálogo, la solución “cómoda” pero inefectiva, puesto que garantiza la permanencia del chavismo en el poder.
Esas son las cuatro razones principales. Todas se están debilitando, quizás con la excepción de la actitud de la Fuerza Armada, la cual permanecerá en su papel de cómplice hasta el último momento, hasta que desaparezcan las otras tres razones.
El dinero se acaba. La postura estadounidense ha cambiado radicalmente y una oposición verdadera, como es el caso de GANA Venezuela, está reemplazando progresivamente a la falsa oposición.
Todavía tengo la certeza de que el chavismo no llegará al término “normal’ de su satrapía. Dejarlo llegar sería una derrota moral de primer orden para el país decente.