El plebiscito planteado por la Mesa de la Unidad Democrática (MUD) busca la salida del presidente Nicolás Maduro para solventar la crisis que atraviesa Venezuela, pero sus dirigentes dan lecturas distintas sobre lo que pudiera ocurrir luego del 16 de julio, cuando está previsto que se celebre la consulta.
Freddy Guevara, vicepresidente de la Asamblea Nacional (AN), tilda el plebiscito de ultimátum, en lo que espera marque un antes y un después en la historia del país. “Lo que viene es la rebelión total del pueblo: todos lados, todo momento al mismo tiempo”, dijo en exclusiva a El Nacional Web.
A juicio del diputado, dirigente del partido Voluntad Popular, la contienda debe conllevar a un cambio de gobierno, y por ende, evitar que se den las votaciones a la asamblea nacional constituyente (ANC), programadas para el 30 de julio.
“Antes de 30 de julio tiene que haber tanta presión para que Maduro entienda que tiene que negociar una salida o que los militares le retiren su apoyo”.
En una línea similar se manifestó Stalin González, parlamentario a la AN, quien sin embargo no se atrevió a calificar la última jugada de la MUD como un ultimátum. “No se trata de un todo o nada sino del comienzo de una nueva jornada de manifestación con millones en las calles mostrando su rechazo al modelo”.
Acerca de la ANC, fue enfático en que no debe llevarse a cabo. “Es un fraude y el 90 % del pueblo no quiere eso”, señaló, para enviar una advertencia al gobierno: “Deben entender que su modelo causó la crisis y que ni tienen el respaldo de hace unos años ni nosotros somos la misma oposición”.
En ese sentido, Julio Borges, presidente de la AN, expresó que la derrota sería segura para Maduro: “Mientras el 16 se envía un mensaje al mundo de un repudio masivo a Maduro, el 30 de julio ellos intentarán amenazar y someter a un pueblo que no les responderá porque lo que quiere es democracia”.
Hora Cero
Una vez culminado el plebiscito, la MUD tiene previsto ofrecer unos primeros resultados en la noche del domingo, para luego dar un plazo de respuesta al gobierno para ver cómo reaccionan.
“Puede que no se decrete el 17 sino uno o dos días después, en una última oportunidad para que el régimen cambie su postura”, indicó.
González, por su parte, lo secundó: “Hemos llegado a un punto en el que acaban con la paciencia de los venezolanos. El Consejo Nacional Electoral, el Tribunal Supremo de Justicia y el Ejecutivo cerraron las vías democráticas”.
Sin fecha de caducidad
Más allá de lo que el gobierno pudiera decidir después del plebiscito, Cecilia García Arocha, rectora de la Universidad Central de Venezuela (UCV), una de las universidades elegidas por la MUD para servir de árbitro durante la contienda, aseveró que no se debe tomar la propuesta como un fin de mundo.
“El mundo y el país no se acaban ni el 16 ni el 30 de julio; seguiremos la lucha pacífica hasta recuperar el hilo constitucional que está vilmente roto”.
Luís Pico vía El Nacional