Las calles de Ambrosio se preparan para venerar y bailar la imagen del santo, que pesa 75 kilos. Con devoción, los cargadores se preparan para dar lo mejor de ellos en la celebración que recorre 12,5 kilómetros.
Desde la semana pasada la imagen de San Benito de Palermo se encuentra en restauración en manos de sus fieles cargadores para salir en procesión mañana 27 de diciembre. La organización de la gran fiesta religiosa una vez fue asumida por un grupo de feligreses en pago de promesa. Este año, como los anteriores, los gastos fueron asumidos por sus seguidores.
Para los cargadores la situación económica no representa un obstáculo. Más de 25 años tiene Franklin González, cargador y restaurador, rindiendo honores al santo. Desde hace cuatro años le tocó la responsabilidad de asumir la organización de la procesión junto a tres cargadores más.
Alega que además de representar un honor, es un pago de promesa velar por las fiestas del santo negro. Comenta que con anticipación salen en búsqueda de los materiales para iniciar el proceso de mantenimiento de la imagen que pesa cerca de 75 kilos, más los 35 de la base donde colocan al santo.
Nueva vestimenta
Como todos los años, San Benito estrenará nueva vestimenta. En esta ocasión la capa vendrá de mano de un feligrés marabino. Las pinturas para la restauración son donaciones que hacen devotos, así como el resto de los materiales. Es una fiesta que pasó a ser responsabilidad de quienes veneran al santo.
Con devoción, los cargadores se preparan para dar lo mejor de ellos en la celebración que recorre 12,5 kilómetros en la parroquia Ambrosio. Hasta el momento no hay un número preciso, pero aseguran que son numerosas paradas pautadas para las personas que desean pagar sus promesas, todo esto en un tiempo de casi 12 horas.
«El santo es del pueblo, nosotros solo hacemos el trabajo de custodiarlo como un acto de amor y en pago de promesa por tanto que nos ha dado”, resaltó González, quien también se encarga de restaurar la imagen del santo negro.
Afinando detalles
Jorge Pérez Duno, párroco y organizador de las fiestas de San Benito, señaló que la logística y seguridad de la fiesta queda a manos de la gerencia local. Estiman que la seguridad se acerque a los 800 efectivos como el año pasado. La cita será a las 7.30 de la mañana en las afueras de la Catedral Nuestra Señora del Rosario, de Cabimas.
Con información de La Verdad